Resumen: El recurrente alega tener unos daños psicológicos consistentes en ansiedad, depresión y estrés causado por un mobbing continuado iniciado prácticamente desde su toma de posesión, que tuvo lugar en 2 de diciembre de 2005, como Médico de Admisión y Documentación Clínica en el Hospital General "Obispo Polanco". La Sala indica que resulta sorprendente que pueda haber una suerte de acción concertada, constante y sistemática a lo largo de tantos años por una pluralidad de directivos, designados por diferentes administraciones a lo largo de los años, además en diferentes ámbitos, el Hospital o la Gerencia, no habiendo siquiera apuntado por qué se produciría tal situación, si para favorecer a alguien, para perjudicarle por algún motivo de venganza, o por un mero disfrute de la situación de poder, y sin que se vislumbre tampoco en los hechos que aporta. no hay acoso ni violencia psicológica, siendo más bien al contrario, el recurrente tiene una conducta que demanda una respuesta de su entorno laboral concreta, ajustada a su visión, y con la que de modo reiterado se muestra disconforme, con una absoluta rigidez en sus planteamientos y una total incapacidad para aceptar que la no admisión de sus planteamientos por los demás no significa ni que estén equivocados ni que pretendan hostigarle de algún modo, no preguntándose siquiera que quien pueda errar en su visión de la cuestión laboral sea él.